Nuevamente despierta la mañana
anunciando con ella un nuevo día,
las aves, bullosas, cantarinas,
comienzan a volar de rama en rama.
Al pie de mi ventana un algarrobo
sostiene como todas las mañanas
una hermosa y linda guacharaca
que solitariamente espera a su mozo.
Así es el amor del solitario,
solamente se haya acompañado
del recuerdo de una moza errante…
Mientras tanto añora que una dama
comparta consigo esta mañana
y se vaya nuevamente por la tarde.
PanchoTronera
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