La noche descansa en la aurora
arrullada
por las aves,
amanece
nuevamente
en
los bordes de los sauces,
los
samanes acobijan
garceros
en los estanques
y
la luna se guarece
hasta
que llegue la tarde.
Un
aroma de eucalipto
se
cuela con el mastranto,
los
búfalos del estero,
los
aullidos de araguatos,
los
potreros a los lejos,
el
relincho de caballos,
y
el movimiento sereno
ya
se siente en el ganado.
Amanece
nuevamente
y
se alegran en el caño
los
animales que tienen
su
morada y su descanso.
los
caimanes, las iguanas,
los
gallitos y los patos
conciertan
un alboroto
porque
ya están despertando.
En
el rancho las bombillas
se
pueden ver titilando
y
el aroma del café
que
la doña está colando
me
indican que ya muy pronto
estaré
desayunando
unas
caraotas refritas,
arepa
y queso rayao.
Así
amanece en mi tierra,
así
amanece en mi llano,
más
o menos parecido
amanece
en otros lados
y
a pesar de los pesares,
de
lo que estemos pasando.
un
nuevo día amanece
en
suelo venezolano.
PanchoTronera
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