La luna
lánguidamente
se va
asomando en el cerro,
como en
una sinfonía
aparecen
los luceros,
va
iluminando el camino
que se
torna placentero
porque
mi corazón es feliz
cuando
con ella me encuentro.
Ahora
estamos en creciente
el
conuco aún está seco,
a pesar
de los chubascos
todo es
un peladero
y pa´
molé los terrones
este
tiempo es el bueno
y se
vuelve una arenilla
cuando
rastreo el terreno.
El
cielo ha estado oscuro
varios
días por completo,
se han
visto unos nubarrones
arrejuntáos
al cerro,
pero yo
no me confío
porque,
aunque no soy muy viejo
sé leer
las condiciones
tan
solo con ver pa´l cielo.
Voy a
esperá una semana,
yo
mejor me voy pa´l pueblo,
allá
tengo una “mediagua”,
una
cría de conejos
y a mi
negra Estefanía
que es
lo que yo más quiero
y tengo
que ir a verla
antes
que vaya el “pulpero”.
Voy a
ponerme “guenmozo”
por eso
me cortaré el pelo,
pa´
aprovechá que la luna
pone
bonito el cabello,
también
me voy a comprá
un
perfume que sea “gueno”
pa´
juntámelo en toas partes,
en la
cara y en el cuello.
Cuando
llegue a la “mediagua”
voy a
llegar en silencio,
voy a
agarrá a mi mujer
y le
zamparé un beso,
voy a
lamberle el jocico
como si
fuera un becerro
y la
llevo a la laguna...
a
bañarnos con la luna
para
pasarla bien “gueno”.
PanchoTronera
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